Las fatigas de la muerte (La lógica cultural del capitalismo químico)
Texto entregado a los visitantes de la exposición el día previsto para su inauguración (2 de marzo, 2006)
(Anverso)
El proyecto Las fatigas de la muerte (La lógica cultural del capitalismo químico) que debía presentarse hoy en la Sala Imagen de la Caja San Fernando de Sevilla ha sido aplazado. No debe entenderse este aplazamiento como una censura, con la misma lógica cultural, debe entenderse que el libro-catálogo que se debía presentar hoy en el acto de inauguración, tampoco se presentará, y por supuesto, no debe entenderse este acto como un secuestro del citado libro.
Sí debemos entender que estas actuaciones entran dentro de la lógica cultural del capitalismo químico, que a través de sus representantes (Federación Onubense de Empresarios, Federación Andaluza de Empresarios y la propia Asociación de Industrias Químicas y Básicas de Huelva) impide que esta Caja San Fernando cumpla con los acuerdos contraídos con el autor del proyecto, argumentando estar sometida a fuertes presiones por parte de las citadas organizaciones empresariales para que el aplazamiento llegue hasta sus últimas consecuencias: no ser y no estar.
Mentidnos y llamadlo publicidad.
(Reverso)
El pasado 2 de marzo de 2006 debía inaugurarse en la Sala Imagen de la Caja San Fernando, la exposición Las fatigas de la muerte (La lógica cultural del capitalismo químico).
Horas antes de la inauguración, tras un largo proceso de construcción del proyecto, dado a conocer paso a paso por el autor a la institución y cuando la exposición estaba completamente montada, las invitaciones enviadas, el libro/catálogo editado y los participantes en unas mesas redondas convocados, la dirección de la Caja San Fernando informa al artista que la exposición queda aplazada, colocándose en la puerta de la sala un cartel que se limita a informar del aplazamiento.
Según reconoció José Manuel Amores, Jefe de la Obra Social de la Caja San Fernando, en unas declaraciones al diario El País (4 de marzo, 2006), el aplazamiento se realizó “a propuesta de una serie de empresarios onubenses que consideraban que se iba a tratar un problema en un foro en el que no estaban todos los afectados”.
Los abajo firmantes exigen la apertura inmediata de la exposición Las Fatigas de la muerte dentro del periodo temporal previsto, así como la distribución y puesta a la venta de su libro/catálogo y la realización de las actividades complementarias:
1.
Porque creemos encontrarnos ante un acto puro y duro de censura, impuesto por la industria química onubense, con el único objetivo de impedir que se conozcan y debatan los efectos que la contaminación química está produciendo en Huelva; y con ello se está privando al arte y a los creadores de su capacidad para abrir el horizonte, tanto en torno a la representación como a la visibilización de unas determinadas problemáticas.
2.
Porque nos parece inaudita la forma en que esta censura se ha realizado, a tan solo unas horas de la inauguración y cuando ya estaba finalizado el proceso de trabajo y materializada su forma de presentación.
3.
Porque aceptar este acto supone condenar al mayor descrédito a uno de los pocos espacios de la ciudad de presentación de propuestas artísticas que apuntaba como una de sus líneas de actuación apoyar proyectos y autores que se proponen recuperar para el arte un papel activo, relevante, en el sentido de su participación en el diálogo, el debate y los conflictos que se plantean en la sociedad actual.
El total de personas participantes solidarizadas con la censura del proyecto llegó a superar las 400 firmas. También se incluyeron algunas instituciones entre las cuales se encuentra ADACE (Asociación de Directores de Arte Contemporáneo de España.
Extracto del capítulo 02 de libro secuestrado
¿Cultura química?
“El idealismo y el cinismo se han encontrado en la zona cero y hasta ahora, siguen en tablas”. Parece como si todos los poderosos quisieran tener una zona cero que les permitiera poner nuevas reglas de juego en sus ámbitos locales. Desde este punto de vista, la catástrofe tiene cierta lógica y, es este planteamiento inicial, desde el que inicio este trabajo Las fatigas de la muerte (La lógica cultural del capitalismo químico).
La época que nos ha tocado vivir está llena de contradicciones que ocultan el verdadero rostro de nuestro tiempo. Por un lado, los indicadores económicos crecen año tras año, durante décadas estos marcadores han influido tanto en la toma de decisiones políticas que se han obviado otros indicadores fundamentales a la hora de las decisiones medio ambientales; y por otro, los primeros informes que vinculaban la actividad humana y la presión sobre los ecosistemas terrestres mostraban la incapacidad de los indicadores utilizados hasta estos momentos, principalmente el indicador de la riqueza monetaria PIB, para permitir establecer un diagnóstico más adecuado de la salud del Planeta. La contabilidad física es prácticamente inexistente, cada vez se reclama más el nivel micro, la escala local y la consideración de medidas no sólo monetarias.
Este trabajo quiere ver hasta dónde se puede vincular lo cultural y lo químico, persuadido por la idea de que a día de hoy es imposible separar ambos campos. Con el convencimiento de que toda la actividad humana se rige por la segunda ley de la Termodinámica, y por supuesto, la cultura no habría de ser menos. [...]
[...] Así pues, amigo lector, este trabajo trata tanto de patrocinadores como de patrocinados, de la forma de estar ahí.
"Las fatigas de la muerte (La lógica cultural del capitalismo químico)"
Sala Imagen, Caja San Fernando, Sevilla (2006)
"Las fatigas de la muerte (La lógica cultural del capitalismo químico)" fue un proyecto producido por la Fundación Caja San Fernando para ser expuesto en su sede Sala Imagen de Sevilla, en el año 2006.
© 2006 Isaías Griñolo